El paracetamol, acetaminofeno o acetaminofén, es un fármaco analgésico (que quita o disminuye el dolor) y antipirético (que reduce la fiebre).
Es un componente habitual de gran variedad de medicamentos comerciales, ya que sus propiedades para aliviar el dolor y reducir la fiebre ayudan contra varios padecimientos, como la influenza e infecciones de garganta, golpes, torceduras y otras afecciones.
Cuando es administrado de manera controlada (sin excesos) no afecta a los sistemas cardiovascular y pulmonar, tampoco al equilibrio ácido-base del organismo, no irrita la mucosa gástrica y no tiene efectos sobre la excreción de ácido úrico y la agregación plaquetaria.
Gracias a esta noble acción, es altamente utilizado como ingrediente activo en la fórmula de diversos fármacos. A diferencia de los analgésicos opiáceos, no altera el estado de ánimo del paciente. Estos últimos provocan euforia o depresión.
Hasta el momento, no se han encontrado indicios de que el paracetamol genere adicción.
Contenido
¿Para qué sirve el paracetamol?
El paracetamol tiene funciones específicas que benefician al paciente, garantizando un bienestar en poco tiempo en cuestión de alivio del dolor y disminución de la fiebre.
El paracetamol sirve para:
- Quitar o disminuir el dolor
- Tratar la fiebre de varias afecciones
Quita o disminuye el dolor
El paracetamol ataca el dolor; actúa inhibiendo a las prostaglandinas (sustancias lipídicas que sirven como mediadoras en varios procesos orgánicos), impidiendo de esta manera la aparición de la sensación de dolor en algunas lesiones como torceduras y golpes en los que el dolor es leve o moderado.
Se encarga de calmar el dolor provocado por contusiones y otros padecimientos en los que no es necesario un tratamiento con morfina y otras drogas potentes, la mayoría opiáceos.
El paracetamol se encarga de paliar dolores crónicos, dolores recurrentes y lesiones de poca gravedad, siendo ingerido en cuatro maneras distintas:
- Usualmente de forma oral, mediante tabletas.
- Administrado por vía intravenosa e intramuscular con inyecciones
- Consumido por vía ocular o nasal por medio de gotas concentradas
- Introducido al cuerpo por la vía rectal, mediante supositorios
Por su efectividad disminuyendo el dolor muscular, es frecuentemente utilizado contra dolores asociados con la edad, como la lumbalgia o los de la artritis.
El paracetamol se emplea para calmar dolores de origen diverso, como los menstruales, las cefaleas, dolores dentales y los dolores neuropáticos, relacionados con las neuropatías diabéticas.
Tratar la fiebre en varias afecciones
El paracetamol disminuye la reacción febril en varios padecimientos, como la gripe y el sarampión. Gracias a este efecto antipirético, es habitual que esté presente en medicamentos para el combate de la gripe, pero también es administrado de manera independiente, sin combinarse con los antigripales.
El paracetamol es un gran apoyo durante las afecciones de la garganta, en que la irritación provoca un dolor molesto.
Contraindicaciones del paracetamol
El uso de este fármaco está contraindicado para una variedad de pacientes:
- Quienes padezcan o hayan padecido alguna enfermedad del hígado, dado que este órgano puede verse afectado de gravedad por el medicamento.
- Mujeres embarazadas o que estén lactando. Este medicamento atraviesa la placenta y puede también alcanzar la leche materna, por lo que los cuidados se dan bajo instrucciones detalladas de un médico.
- Quienes beben alcohol en un tiempo próximo al contacto con el paracetamol
- Pacientes que actualmente consumen otros medicamentos. Esta contraindicación debe atenderse, dado que un médico es el encargado de aprobar la combinación de medicamentos, analizando los posibles efectos. Con esta observación, se pueden llegar a evitar reacciones de toxicidad.
¿Consumir paracetamol tiene efectos secundarios?
Una consecuencia del consumo inadecuado es la toxicidad, generada por ciertas causas principales:
- Consumo en exceso
- Ingerirlo en ausencia de síntomas aparentes
- Acompañarlo con la ingesta de alcohol
En los casos anteriores, la toxicidad llega a arriesgar al paciente a sufrir:
- Náuseas
- Pérdida del apetito
- Ictericia en piel y ojos
- Dolor de estómago
- Insuficiencia renal
- Insuficiencia hepatocelular (disfunciones en el hígado)
- Cuando hay daño hepático severo, se desemboca en la necrosis del tejido y la muerte del órgano.
En personas alérgicas al paracetamol, se pueden presentar síntomas adversos como:
- Dificultad para respirar
- Dolor de cabeza
- Hinchazón de garganta, rostro, lengua, labios
- Surgimiento de ronchas
- Convulsiones, en contados casos
