La caléndula, cuyo nombre científico es Calendula officinalis, es una planta medicinal clasificada en la familia de las asteráceas. Está agrupada junto con las margaritas, el árnica y los dientes de león. Es una planta nativa del mediterráneo, por lo que su distribución es bastante amplia en los países de Europa. Actualmente, se le puede encontrar mundialmente como planta de ornato o silvestre.
La caléndula, según la región en que se cultive, recibe diferentes nombres, siendo los más comunes caléndula, mercadela y botón de oro. Es una planta pequeña con altura promedio de 40 cm, con hojas lanceoladas y flores amarillas o amarillo-naranja, liguladas y similares a las camomilas y las margaritas.
Hay muchas variedades dentro del género caléndula, pero la más usada en medicina tradicional es la Calendula officinalis, la cual ha sido recurrida por la antigua civilización egipcia y cuyas propiedades han sido tratadas por los griegos y los romanos, llegando a ser incluida como una de las plantas que el rey Carlomagno ordenó que fueran plantadas en todas las villas.
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¿Para qué sirve la caléndula?
La principal función de la caléndula es como cicatrizante y desinflamante, por ello muchos preparados herbales, homeopáticos y medicinales le incluyen, resultando en pomadas y cremas. Las partes que contienen más componentes activos en la caléndula son las flores y las hojas, quedando las flores en primer lugar de concentración de sustancias.
Es común usar las flores de la caléndula en infusiones o tinturas, ya sea frescas o semisecas, pues sus efectos desaparecen cuando la humedad se evapora por completo de ellas. A esta planta se le atribuyen numerosas propiedades, pero aún se desconoce si alguna de ellas tiene algún fundamento científico.
La caléndula sirve para:
- Remediar síntomas y malestares
- Tratar lesiones en la piel
- Curar golpes y moretones
- Tratar heridas internas y amigdalitis
Sirve para remediar los siguientes síntomas y malestares:
La Calendula officinalis se prepara para el tratamiento de padecimientos y condiciones como:
- Acné
- Cicatrices
- Heridas
- Piel reseca
- Quemaduras leves
- Raspones
- Inflamación
- Cólicos menstruales
- Cólicos intestinales
- Infecciones leves de la piel
- Infecciones vaginales
- Manchas en la piel
- Estrías
- Comezón
- Dermatitis
- Ampollas
- Golpes
- Cólera
- Úlceras
- Indigestión leve
- Rozaduras de pañal
- Dismenorrea (Menstruación irregular)
- Amigdalitis
- Llagas
Ayuda a tratar lesiones en la piel
Según estudios clínicos, se ha comprobado que la Calendula officinalis es efectiva como cicatrizante, emoliente y desinflamante, debido a que contiene sustancias como:
- Ácido salicílico
- Ácido málico
- Ácido gentísico
- Mucilago
- Quercetina
- Flavonoides
- Terpenoides
- Cariofileno
Todas estas sustancias tienen propiedades medicinales, antisépticas y desinflamantes, todas ellas en cantidades suficientes y efectivas. El mucilago, el ácido salicílico y los flavonoides ayudan en la regeneración de la piel durante la cicatrización.
Por ello, desde la antigüedad se usa la caléndula en emplastos, ungüentos y cataplasmas, para tratar heridas, verrugas e infecciones en la piel, y actualmente se aplica en heridas postquirúrgicas y enfermedades cutáneas.
Curar golpes y moretones
La caléndula ha tenido uso para desinflamar los golpes, pues sus efectos antiinflamatorios son similares a los del árnica, aunque más leves y lentos. Además, tiene propiedades antisépticas, por lo que también su aceite, su tintura y su infusión se usan para desinfección de heridas, eliminación de algunos hongos y tratamiento de otras infecciones.
Se usa para tratar heridas internas y amigdalitis
Es común que los médicos herbolarios y homeópatas recomienden la caléndula para tratar heridas internas, como las úlceras, heridas quirúrgicas y lesiones o golpes. En la medicina convencional hay quienes usan la caléndula para tratar las úlceras del estómago y de la boca. Además de estos fines, esta planta puede ayudar a calmar la amigdalitis.
¿La caléndula puede provocar efectos secundarios?
La caléndula sí puede provocar efectos adversos en situaciones como:
- Pacientes alérgicos
- Pacientes con sistema inmune debilitado
- Aplicación sobre los ojos, heridas muy expuestas o mucosas; especialmente la tintura o el aceite pueden irritar o quemar la zona afectada.
- Mujeres embarazadas
- Mujeres en etapa de lactancia
Este artículo es de carácter informativo y no sustituye la opinión médica profesional. Consulta a un médico.
