El apio es una hierba perteneciente a la familia de las opiáceas. Es una especie vegetal oriunda de regiones de medio oriente y Europa, donde se ha cultivado como hortaliza desde hace milenios. También se consume el apio silvestre, que se caracteriza por un sabor más picante que el apio cultivado y por tener tallos más delgados que este.
El apio se utiliza comúnmente como condimento para diversos guisos y sopas; también para comerse crudo, por sus varias propiedades nutricionales y medicinales, benéficas para el organismo.
Según los especialistas, el consumo regular de apio es benéfico para el organismo, por lo que hay que incluirlo en la propia dieta.
Contenido
¿Para qué sirve el apio?
El apio es una especie vegetal capaz de aportar sustancias químicas que colaboran en el bienestar del organismo humano.
El apio sirve para:
- Aportar nutrientes
- Depurar el organismo
- Mejorar la salud cardiovascular
- Reducir el azúcar en la sangre
- Combatir la alitosis
- Prevenir la obesidad
- Otros efectos específicos
Aportar nutrientes
El apio contiene nutrientes como los carbohidratos, que nos proporcionan energía, así como vitaminas (A, B1, B2, B3, B5, B6, C, y K), minerales como hierro, calcio, magnesio, manganeso, fósforo, potasio, sodio y zinc.
Además, se forma de fibras naturales y agua, por lo que es recomendable utilizar esta hierba en la dieta cotidiana, ya sea en jugos, ensaladas o como condimento en guisos.
El apio sirve para depurar el organismo
El apio contiene grandes cantidades de clorofila, que ayuda a controlar la población de bacterias de la flora intestinal.
También es una planta diurética que permite la salida de toxinas por medio del sistema urinario. Evita así afecciones como la formación de cálculos renales.
Su alto contenido de fibra permite la desintoxicación y la desecación de sustancias que se alojan en los intestinos. Se mejora la digestión y evita el estreñimiento.
Ayuda a mejorar la salud cardiovascular
El apio es una hierba que contribuye a la salud cardiovascular, gracias a que contiene vitaminas como el ácido fólico o vitamina B9.
Gracias a la clorofila que contiene, ayuda a equilibrar los niveles de glucosa en la sangre, mejora la circulación sanguínea y, por tanto, la oxigenación.
Según algunos estudios, el apio ayuda a la disminución del colesterol por la reducción de los triglicéridos. Suele recomendarse consumirlo en ensaladas. Este efecto del apio es más supuesto que producto de una conclusión del estudio.
Reduce el azúcar en la sangre
El apio ayuda a bajar los niveles de glucosa en la sangre, por lo que es un alimento útil en el control de la diabetes. Se recomienda, para este fin, tomarlo en jugo de zanahoria con papa, o bien consumirlo como crema de apio.
Para combatir la halitosis
El consumo del apio es recurrido para combatir la halitosis o mal aliento. Esto se logra consumiendo en ayunas jugo de manzana con apio.
Se recomienda beber dos vasos de esta mezcla al día, a lo largo de una semana.
Ayuda a prevenir la obesidad
El apio, al consistir de fibra natural y agua, al ser ingerido da la sensación de tener el estómago lleno, y evita que tengamos hambre.
Suele ser ingerido en jugo de perejil con apio, en ensaladas, en jugos de apio con alfalfa, aguas frescas con apio, o como botana, entre comidas.
Otros efectos específicos
El consumo de apio tiene otros beneficios muy particulares, como:
- Neutralizar los ácidos del cuerpo: así se produce una acción diurética y digestiva.
- Formar bilis: el apio, gracias a su alta concentración de sodio, apoya al hígado perezoso en este fin.
- Prevenir los coágulos en la sangre: el apio mantiene la sangre en su estado líquido y sin agruparse, con lo que se previenen embolias.
- Disolver las toxinas del cuerpo
- Combatir las arritmias: consumiendo apio crudo o en platillos cocinados, se mantiene el corazón latiendo a un ritmo consistente.
